La comunidad de La Pedrera mantiene confianza en la Revolución Bolivariana
El concejal metropolitano Nahum Fernández explicó que no hay razones para temer el traslado hacia el refugio Pomarrosa, ubicado en Catia, ya que es uno de los óptimos de la capital
Cuando la lluvia cae con toda su fuerza la mayoría de las personas corre para llegar a sus casas y guarecerse. Sin embargo, para las y los habitantes del sector La Pedrera, en la parroquia Antímano de Caracas, la situación es inversa, porque cuando arrecia el aguacero sus viviendas se convierten en epicentro de riesgo.
El 13 de agosto de este año, en la Gaceta Oficial N° 40.227, fue publicado el Decreto 305 de la Presidencia de la República, con el que “se crea el Área de Emergencia Habitacional (Areha) Barrio La Pedrera”, la cual abarca 118 hectáreas y es una figura contenida en la Ley Orgánica de Emergencia para Terrenos y Vivienda.
“Peligro inminente para la vida” es una de las razones por las cuales se crea un Areha, por lo cual están orientadas a salvaguardar la integridad de sus habitantes a través de la generación y aceleración de políticas que permitan atender eficazmente la situación.
En este sentido, el pasado 11 de octubre el gobierno de calle -con el vicepresidente Jorge Arreaza a la cabeza- llegó a La Pedrera para, de la mano del Poder Popular, continuar las acciones que emprendió el comandante Hugo Chávez en el año 2010, cuando ordenó el desalojo y dignificación de más de 2.500 familias que se encontraban allí y padecieron los embates de la vaguada que se registró ese mismo año.
LA NATURALEZA Y LOS ADECOS
Explotación de minerales era lo que ocurría en las montañas de La Pedrera antes de ser habitadas en la década de los 70 del siglo XX, proceso que se llevó a cabo sin planificación y sin medir las consecuencias del tiempo y las innegociables leyes de la naturaleza.
Carlos Andrés Pérez conducía el gobierno para la época y en 1974 designó a Diego Arria como Gobernador del Distrito Federal, quien, entre otras cosas, es recordado por los habitantes de La Pedrera como el hombre que un día los llevó ahí y, como solución temporal a su condición de damnificados, abrió las compuertas de un tráiler de ocho metros cuadrados.
Sin embargo, temporal solo sería la esperanza de muchos, pues los días, los meses, las décadas, las tragedias y los gobiernos pasaron y nunca recibieron una casa; solo se prendieron más lucecitas en la montaña y engrosaron la lista de “damnificados y olvidados”, como dijo Josefa Ospino al recordar a los fundadores de la comunidad donde ella vive desde hace 17 años.
En su poema Oda al Tiempo el chileno Pablo Neruda decía que “El tiempo es decidido… Camina por dentro de nosotros / aparece como un agua profunda en la mirada”; y efectivamente así aparecen los años de espera y esperanza en los ojos de mujeres como Josefa, quien recuerda con una sonrisa el amor con el que, en la navidad del año 2010, Chávez subió a La Pedrera para decirles: “¡Vamos a vivir!”.
CHÁVEZ COMPROMETIDO CON LA PEDRERA
El año 2010 se despidió de Venezuela con aguaceros que cambiaron la vida de miles de personas y las realidades de decenas de comunidades en todo el país, entre ellas La Pedrera, donde la fuerza del agua fue tan fuerte como la dinamita que décadas atrás habían estremecido la montaña.
Como siempre, Chávez acudió al llamado del pueblo y, luego de recorrer las calles de la comunidad, asumió el compromiso no solo sacarlos de allí, sino de trabajar para que todas y todos lograran tener una vivienda digna.
En esa misma oportunidad el Comandante recordó cómo las políticas neoliberales de la Cuarta República condenaron a millones de venezolanas y venezolanos a la miseria: “Todos estos barrios son el producto de 100 años de gobiernos antipopulares”.
EL COMPROMISO SIGUE
Para atender las consecuencias de las lluvias del año 2010 el comandante Chávez creó la Gran Misión Vivienda Venezuela, con la que se han construido más de 454 mil casas en todo el país y de las cuales hoy día 1.799 son habitadas por las familias de La Pedrera con las que Chávez se comprometió.
Sin embargo, aún 834 familias continúan esperando su oportunidad, por lo cual el presidente Nicolás Maduro asumió el compromiso de cumplir con la palabra del Comandante.
Para ello, actualmente los seis Consejos Comunales de La Pedrera se han organizada en una mesa técnica encabezada por la Vicepresidencia de la República e integrada por la jefatura de gobierno, la alcaldía de Caracas y el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
En una jornada de gobierno de calle realizada en el sector el pasado 11 de octubre, el vicepresidente Jorge Arreaza explicó que en el allí “quedan 48 familias en un altísimo riesgo, y esas familias pueden ir de inmediato a un refugio y en los próximos meses a sus viviendas dignas”.
EL PODER POPULAR
“Yo nací y me crié aquí, y he visto los embates de la naturaleza durante todos estos años”, comentó Euclides Ruiz a Correo del Orinoco, además de explicar que a través de la organización popular se ha logrado iniciar un trabajo articulado con la Vicepresidencia para atender “ese clamor que se le hizo al presidente Maduro para que se decretara el área de emergencia habitacional”.
Indicó que la comunidad fue visitada por Nicolás Maduro Guerra, hijo del Mandatario Nacional, en compañía de los inspectores de la Misión Eficiencia o Nada, quienes pudieron constatar la situación actual.
“Hubo una pausa y por eso fue el descontento, pero ahora tenemos una respuesta efectiva y llegó el gobierno de calle donde se nos dieron algunas opciones”, señaló Ruiz, quien aseguró que la comunidad está dispuesta a coadyuvar para que se cumpla con decreto de desalojo y resguardo de la vida.
LAS RESPUESTAS Y LA CONFIANZA
El ministro del Poder Popular para la Vivienda y Hábitat, Ricardo Molina, también acompañó a la comunidad de La Pedrera en el gobierno de calle y ofreció las primeras respuestas para continuar brindando apoyo a la colectividad.
Ruiz explicó que en la asamblea se planteó que dentro un poco más de un mes estarán disponibles 50 apartamentos en el estado Vargas. Asimismo, se prevé que en el proyecto de Ciudad Caribia también se otorguen más de 200 apartamentos para las familias de La Pedrera, mientras otras 600 podrán ir a su hogar propio en Ciudad Mamera o el interior del país.
“Yo sí tengo confianza en mi gobierno, porque se ve que están con nosotros, siempre nos brindan apoyo, porque antes sí nos sentíamos desamparados”, expresó Carmen Zapata, una de las habitantes de la comunidad cuya vivienda está priorizada por encontrarse en mayor nivel de riesgo.
Estas primeras 48 familias que serán desalojadas en los próximos días, irán en un primer momento a un refugio, del cual saldrán directo a sus casas propias.
“Están hablando de llevar a las familias al refugio Pomarrosa, porque es uno de los que maneja la vicepresidencia y se encuentra en condiciones dignas”, indicó Ruiz, quien es vocero del Consejo Comunal María Auxiliadora.
LOS QUE NO SE QUIEREN IR
A pesar de las respuestas ofrecidas por el Gobierno Nacional y aquel llamado que hizo el comandante Chávez en el 2010, aún hay familias en este sector de Antímano que sienten temor de salir de sus casas para ir un refugio temporal.
Lucina Jaramillo vive desde hace 17 años en el Quinto Plan de La Pedrera y es una de las que teme abandonar su vivienda, aun cuando está consciente de que se encuentra en una zona de alto riesgo.
“Yo me fui una vez y estuve ocho días en el refugio de La Ronco, y de ahí salí enferma, así que yo no quiero refugio, yo quiero irme a mi vivienda nueva de una vez”, expresó Lucina.
Asimismo, explicó que su desconfianza responde al hecho de que su hermano está en un refugio desde el año 2010 y aún no ha dado casa: “Desde el año pasado le están dando y nada, ese es el temor que tengo yo”.
Ruiz indicó que son pocas las familias que han asumido esta actitud, ya que la mayoría está consciente de que la meta implica la colaboración de todas y todos.
REFUGIO POMARROSA
El concejal Metropolitano Nahum Fernández, explicó a Correo del Orinoco que no hay razones para temer el traslado hacia el refugio Pomarrosa, ubicado en Catia, ya que este es uno de los más óptimos de la capital.
“Nosotros estuvimos ahí y vimos los tráiler donde la Cuarta República los metió en condiciones inhumanas y hasta ahora no hemos visto a ninguno de la oposición que haya subido en todos estos años”, señaló Fernández quien destacó el compromiso con el que el Gobierno Revolucionario ha asumido la situación de La Pedrera.
En este sentido, consideró que las condiciones que el Gobierno pueda brindarle a estas 48 familias en el Pomarrosa “van a ser las mejores que pudiesen tener en este momento en calidad de refugiados”.
Recordó que, de acuerdo con lo conversado en las mesas con la comunidad, el objetivo es que estén el menor tiempo posible en el refugio: “Aquí está la Policía Nacional Bolivariana, tienen todos los servicios y aunque algunos temen a la antigua idea de los refugios de la Cuarta República, ya la situación no es así”.
Asimismo, el candidato a concejal de Caracas, Jimmy Gudiño, reiteró que el comandante Chávez creó la ley de los refugios dignos, lo cual es la primera garantía para estas familias.
“Este es uno de los mejores refugios que hay en Caracas, así que el llamado es a las personas que no quieren venir, y que están en alto riesgo, para que se sumen a esto, pues aquí hay un planteamiento del gobierno de calle”, indicó Gudiño.
En un recorrido por el Pomarrosa con Fernández y Gudiño, se pudo constatar el funcionamiento de los servicios en la infraestructura, así como el orden, el resguardo policial y la alimentación.
“Yo vengo de Alta Vista, y de verdad aquí nos han tratado de maravilla, tenemos servicios y buena convivencia”, aseguró Norberta Márquez, una de las actuales refugiadas en el Pomarrosa.
Márquez ratificó su confianza en la respuesta del Gobierno Nacional y agradeció toda la atención brindada hasta la fecha: “A mí se me cayó mi casa y se que van darme otra, porque he visto como se han ido entregando las viviendas a familias que estaban aquí”.
También señaló que la organización ha sido uno de los elementos principales para la buena convivencia, así como para las labores de cocina y mantenimiento de cada uno de los espacios.
“Aquí vienen a vivir mejor, porque con estas lluvias se les puede caer la casa y lo principal es resguardar sus vidas”, señaló Gudiño, quien recordó que la Cuarta República siempre les negó una oportunidad a estas familias.
Consideró que en Pomarrosa “hay seguridad ciudadana, alimentaria, de la vida; contrario que en La Pedrera, donde pudieran hasta perder sus vidas”.
Fernández recordó que la Gran Misión Vivienda Venezuela no solo quiere resolver el problema habitacional, sino que también persigue transformar culturalmente a las familias pensando en colectivo y el bien común.
“El llamado es a que sigan confiando en el Gobierno Revolucionario. Así como llegó Chávez allá y dijo vénganse conmigo, hoy el mismo gobierno está aquí ofreciendo su mano. Nuestra misión es cumplir la promesa del Comandante”, acotó Fernández.
Enfatizó que el objetivo de que no haya una casa más en La Pedrera y que las familias vayan a lugares dignos donde puedan desarrollarse: “Eso es lo bello del socialismo y de esta misión, que rescata los valores y lleva a la familia a que crezca en condiciones diferentes, para la nueva cultura y que va a generar un futuro más grande”.
GOBIERNO EFICIENTE
Fernández reiteró que “este es el único gobierno que ha dado más respuestas eficientes al pueblo”. Señaló que solo en Caracas se han entregado casi 20 mil viviendas y se están construyendo 27 mil más, entre otras soluciones habitacionales.
Aplaudió el compromiso que ha demostrado el Gobierno Revolucionario para “darle respuestas contundentes a esta gran demanda. La Misión Vivienda ha sido una solución específica para un flagelo que se mantenía escondido en la vieja República”.
Indicó que en aquellos tiempos de democracia representativa muchos consideraban que la problemática habitacional ocupaba un décimo u onceavo nivel, lo cual mantenía a los gobiernos de espalda a la realidad del pueblo.
“Este trabajo de la mano con el Poder Popular nos va a permitir avanzar rápido”, expresó el concejal, además de considerar que “el compatriota Nicolás Maduro ha llegado a cumplir con la palabra de Chávez y para nosotros eso es un respaldo incondicional al pueblo”.
DENTRO DE LAS CASAS DE LA PEDRERA
“La zanja que pasa por el frente de mi casa no está en el mapa de la ciudad. La zanja que pasa por el frente de mi casa se alimenta de este barrio” es el pedacito de una canción de Buena Fe que se repite todos los días entre los estrechos callejones de La Pedrera.
En el Quinto Plan los tráiler que Diego Arria creyó casas se apertrechan entre las colinas, forman cunetas que son el camino tanto para las personas, como para las aguas servidas que se han desbordado sin dejar tregua a la brisa.
Josefa Ospino abrió las puertas de su casa a Correo del Orinoco, primero para mostrar al país que los tráiler no son un mito, pero también para evidenciar como las cloacas han perjudicado su calidad de vida y la de toda la comunidad.
“Desde hace siete meses las tuberías se están reventando por debajo de las casas y está todo colapsado. Estoy muy nerviosa porque vienen las lluvias, así que creo que la opción es irnos a un refugio por ahora”, indicó Ospino.
Explicó que su vivienda ya ha sido inspeccionada por Protección Civil y la comisión de Vicepresidencia: “De verdad que el gobierno nos ha tendido la mano, nos han tomado en cuenta, y han seguido los pasos del Comandante”.
Señaló que aunque hasta ahora no se han registrado enfermedades, la situación no deja de angustiarle, sobre todo por las niñas y niños de la comunidad. “Se nos devuelven las aguas servida y las tenemos dentro de las casas y por todas partes”, enfatizó.
En este sentido, consideró que el traslado de estas familias al refugio debe ser inmediato, porque allá “no es que creo que vamos a recibir respuesta, es que ya nos las están dando y tenemos que hacerle caso al Comandante, salir de aquí”.
Asimismo, Carmen Zapata, quien lleva 10 años en La Pedrera, aseguró que “lo que queremos es que nos saquen de aquí, esto no da para más, y creo que es una falta de conciencia insistir en quedarse”.
Como un río describió Zapata las calles de La Pedrera cuando llueven, al que se le suman las cloacas y el miedo: “¡Ay Dios mío! es lo que ruego y me pongo las manos en la cabeza, en cada palo de agua siento que nos va a tragar la tierra”.
Es por esta razón que también se suma a las voces que les dice a sus vecinos “¡vámonos!”: “Siempre hemos visto la respuesta del Gobierno Nacional, porque muchos se han ido y ya les han dado su casa. Entonces yo también creo que cumplirán con nosotros”.
OTRAS NECESIDADES
El vocero comunitario Euclides Ruiz indicó la necesidad de incorporar al Ministerio del Poder Popular para la Salud en las acciones que se llevan a cabo en La Pedrera, con el objetivo de que lleven a cabo jornadas de vacunación y fumigación para evitar enfermedades.
T/ Jeylú Pereda
F/ Joel Aranguren y Manaure Quintero
CORREO DEL ORINOCO
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